SE DECLARA A UNA TRABAJADORA EN SITUACIÓN DE INCAPACIDAD PERMANENTE POR EL SÍNDROME BURNOUT (“ESTAR QUEMADO”).
El juez considera probado que esta trabajadora, matrona, tiene una “vivencia de injusticia en las condiciones laborales en el ejercicio de su profesión”, con agotamiento físico y mental, así como sentimientos de frustración laboral, lo que conduce a que “muestre una dificultad para adaptarse a su trabajo habitual en un paritorio”.