Incapacidad permanente absoluta de una cajera de supermercado.
En una reciente sentencia de fecha 6 de febrero de 2025 emitida por el Juzgado de lo Social Nº 5 de Santa Cruz de Tenerife y en un asunto tramitado por este Despacho de Abogados, se abordó el caso de una trabajadora que solicitó el reconocimiento de incapacidad permanente absoluta debido a diversas patologías que la inhabilitan para realizar cualquier tipo de trabajo.
La trabajadora, afiliada en el régimen general de la Seguridad Social, presentó su demanda el 6 de mayo de 2024, tras haberle sido reconocida únicamente una incapacidad permanente para su profesión habitual. En demanda expuso la necesidad de que se reconociera su situación de incapacidad permanente absoluta, argumentando que las limitaciones físicas y funcionales sufridas eran severas y permanentes y le impedían la realización de cualquier tipo de trabajo.
Los hechos probados de la sentencia describen la grave condición médica de la demandante: una cuadro de lesiones que incluye una cirugía de reconstrucción de columna y múltiples problemas de salud como trocanteritis bilateral y trastornos del sueño.
Un punto crucial en la sentencia fue el análisis del informe médico pericial, que evidenció la gravedad de las dolencias de la trabajadora y su impacto en su capacidad para trabajar. Los informes médicos, que incluían diagnósticos de diversas especialidades, concluyeron que la actora padecía un dolor crónico severo y limitaciones funcionales que la imposibilitan para realizar tareas laborales con continuidad y eficacia. Este análisis exhaustivo y detallado de las condiciones médicas fue fundamental en la decisión del tribunal.
La sentencia determinó a favor de la demandante, reconociendo su condición de incapacidad permanente absoluta y ordenando al INSS y la TGSS a abonarle una pensión equivalente al 100% de su base reguladora mensual, retroactiva a la fecha de efecto de su incapacidad.