En 1970, el secretario general de las Naciones Unidas le pidió a Casals que compusiera un Himno de la Paz para las Naciones Unidas a partir del texto del Preámbulo de la Carta de Naciones Unidas. Con el alma encogida por la invasión de Ucrania, en Iuslaboralistas Abogados lo queremos compartir con la esperanza del cese de esta guerra injusta e inútil.
Casals aceptó el encargo, pero ante la dificultad del texto se propuso al poeta británivco W.H. Auden, que creara un nuevo texto para la ocasión. La obra, escrita para coro y orquesta sin solistas se estrenó el 24 de octubre de 1971 en la sede de la Asamblea General, en Nueva York, con la participación del Coro de la Manhattan School of Music, los Cantantes de las Naciones Unidas, y la Orquesta de Festival Casals bajo la dirección de Pau Casals.Ese mismo día Casals recibió la Medalla de la Paz de Naciones Unidas.
Preámbulo de la Carta de las Naciones Unidas:
«Nosotros los pueblos de las Naciones Unidas resueltos a preservar a las generaciones venideras del flagelo de la guerra que dos veces durante nuestra vida ha infligido a la Humanidad sufrimientos indecibles, a reafirmar la fe en los derechos fundamentales del hombre, en la dignidad y el valor de la persona humana, en la igualdad de derechos de hombres y mujeres y de las naciones grandes y pequeñas, a crear condiciones bajo las cuales puedan mantenerse la justicia y el respeto a las obligaciones emanadas de los tratados y de otras fuentes del derecho internacional, a promover el progreso social y a elevar el nivel de vida dentro de un concepto más amplio de la libertad, y con tales finalidades a practicar la tolerancia y a convivir en paz como buenos vecinos, a unir nuestras fuerzas para el mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales, a asegurar, mediante la aceptación de principios y la adopción de métodos, que no se usará; la fuerza armada sino en servicio del interés común, y a emplear un mecanismo internacional para promover el progreso económico y social de todos los pueblos, hemos decidido aunar nuestros esfuerzos para realizar estos designios.
Por lo tanto, nuestros respectivos Gobiernos, por medio de representantes reunidos en la ciudad de San Francisco que han exhibido sus plenos poderes, encontrados en buena y debida forma, han convenido en la presente Carta de las Naciones Unidas, y por este acto establecen una organización internacional que se denominará las Naciones Unidas.»