En el despacho estamos actualizando nuestro funcionamiento a la nueva realidad que viviremos cuando se termine el estado de alarma. Intentando con ello garantizar la seguridad de todos, tanto de los miembros del equipo como de los usuarios a los que atendemos.
Así, tenemos previsto facilitar mayoritariamente las consultas por vías telemáticas (videoconferencia, teléfono y correo electrónico) sin perjuicio de habilitar una zona segura para la atención presencial, tanto de los que acuden para algún trámite administrativo como de los que por sus circunstancias harán necesaria la consulta presencial con su abogado.
También estamos buscando fórmulas para que las demandas, escritos o reclamaciones puedan firmarse fácilmente sin necesidad de desplazarse al despacho, con total garantía. Pero siempre teniendo opciones seguras para aquéllos cuyas circunstancias personales requieren que deban acudir presencialmente.
Afrontamos con enorme optimismo esta nueva etapa, ya que, citando a Séneca, “la adversidad es ocasión de virtud”. Y sobre todo, porque queremos seguirles prestando una atención de calidad en estos momentos de enorme retos a nivel laboral.
No nos cabe duda que, juntos, saldremos todos fortalecidos.